Efectos secundarios de la música en la gente. |
Acusados de haber infringido preceptos y leyes fundamentales para el mantenimiento del orden y el sometimiento de la población...
Músicos peligrosos...
Acusados de pervertir a la ciudadanía con letras y sones prohibidos para la moral imperante.
Músicos peligrosos...
Deben ser castigados.
Empecemos por aquellos que fueron vistos haciendo proselitismo del rock. Son culpables el trío de bandas navarras que se acercaron al festival denominado No Sin Música de Cádiz para atraer al público con sones decididamente libertarios. Esta música rock procedente de las guitarras, los bajos, las baterías y las voces de Vuelo 505, Bocanada y sobre todo de unos Marea (reincidentes en esto de agitar al personal desde hace años) encendieron la noche gaditana en una primera sesión del festival que hizo temblar de emoción a los asistentes y de miedo a las mentes bienpensantes...
Bien empezamos, oiga.
Rockeristas
Culpables de rockerismo incurable son aquellos que han venido en llamarse Aurora & The Betrayers. Canciones como mazazos en la ideología musical de la gente, algo que no se debería permitir si no queremos tener a una ciudadanía con buen gusto y bien preparada. Estos chicos saben de lo que se hablan (o de lo que cantan), dominan el escenario con plenitud de facultades y Aurora es una auténtica líder a la hora de arengar a las masas, presa de los espíritus de Janis Joplin y Tina Turner. Con solo una canción de presentación tuvo amansada a la hueste que aullaba abajo del escenario. Frenético show que se quedó corto (bueno, según contaban por allí los asistentes).
El rock acrisolado, fronterizo, con aires de arena desértica vino de la mano de Jairo Zavala, alias Depedro, otro sujeto a tener en cuenta. Lleva más de una década dando "candela" a la gente. No para hasta hacer que cale su mensaje que no es otro que el de que las mezclas sonoras son buenas... ¡Habráse visto! El caso es que Depedro repetía en la cita de la Tacita de Plata y sacó tanto brillo a su actuación que el respetable incluso lo acogió entre su seno para cantar y bailar. Todo va a salir bien se llama su último trabajo discográfico y todo salió bien, excelsamente bien para un músico que teje una magnífica sinergia con la ciudadanía que concurre en cada uno de sus conciertos. Tendremos que vigilarlo de forma más decidida...
Aurora & The Betrayers |
Y en efecto, señores guardianes de la moral, este No Sin Música se encarga de mantener una perversa moda. La de combinar grandes nombres de la escena musical patria con otros que están empezando o que no son tan conocidos, pero que no os engañen: su mensaje es igualmente efectivo. Su música es penetrante, jugosa, perfecta para un festival de esta categoría. Bandas que llevan solo unos años en la carretera pero que se "comieron" el escenario; prueba de este argumento son los potentes directos de los fulgurantes y eléctricos ElyElla; Turmalina (grandes cerrando la segunda jornada, dejando constancia que son una de las mejores bandas gaditanas del momento), Nixon (afianzando su hueco en el indie español a cada concierto) y Barathon Lane (vigoroso power rock llegado desde Casablanca).
Niños Mutantes |
Claro que también tenemos los casos de La Sonrisa de Julia. Bajo este amable nombre, una banda con arrestos para edificar un directo fantástico (según lo que decían en los corrillos de seguidores de su credo, bastantes a juzgar de lo que vimos), con canciones deliciosas, delicadas y con mensajes sencillos pero lanzados como proyectiles a los corazones de los ciudadanos. Un peligro absoluto, vamos. Maratón es el disco que venían a presentar. Su pena debería ser correr tres o cuatro maratones seguidos por lo bien que lo hicieron. All La Glory vinieron desde la cercana Sevilla para sorprender a este testigo con una prestancia fantástica. Aprovecharon su ratito para deslumbrar con un puñado de jugosas canciones en castellano (antes cantaba en el idioma de la Pérfida Albión), cosa que también consiguió, no podían ser menos, los Más Madera, gaditanos con sangre, linfa y espíritu rockero. Purititos rockeros de toda la vida, vamos. Pusieron la mecha para que Los Zigarros lo prendieran todo para terminar el festival...
Pero tenemos que hablar de grandes culpables en que este No Sin Música haya estado en boca de todos. Otro rockero que se las trae y que se dejó caer por Cádiz otra vez (no aprende) es Carlos Tarque que puso el modo rocker total para atrapar a las mentes libres de los gaditanos... Lo consiguió arropado por sus escoltas de La Asociación del Riff. Mismo propósito pero con armas distintas tenían Zahara, Fuel Fandango, Rozalén y Second. Vayamos por partes.
Depedro |
Zahara se vistió de brillantes para alertar al personal que ella venía a deslumbrar. Empezó fuerte, juguetona con su voz y con su música. Divirtió a la concurrencia y alertó de que con ella no valen las medias tintas. O la amas o la amas. O sea... la amas. Porque su concierto fue impecable. Lo sentimos, no tuvimos nada que hacer. Solo pudimos aplaudir.
Fuel Fandango. Fuego. Pasión. Tablas. Arrojo. Abrasión. Creímos que el recinto se venía a bajo. Por momentos, estuvimos a punto de perder el control, pero afortunadamente, Nita y Ale supieron atemperar al personal con buenas melodías... Aún así, pensábamos que el concierto iba a ir a menos pero no... fue como una montaña que no terminas de escalar pero que te sigue dando gusto. Incansables, inmunes al aburrimiento, inmensos.
A Rozalén la seguíamos bien de cerca después de que su música insuflara vida y ganas de diversión a la gente. Realmente peligrosa la albaceteña. Solo tres discos en el mercado y se ha convertido en una de las voces esenciales de la música en español. Vigílenla de cerca porque sus conciertos son un combo explosivo de buen rollo, sensaciones, mensajes que son escuchados y sobre todo, un ramillete de buenas canciones con letras que tocan la fibra humana alejada de todo matiz sentimentaloide. Realmente buena. Realmente necesaria.
Y Second son los primeros en reivindicarse como nombre angular de la historia del indie español. Los murcianos son auténticos profesionales del escenario. Buscan la implicación del personal, son expertos en sacarle a la gente lo mejor con sus canciones abigarradas, barrocas, rotundas. No hay festival que quiera triunfar y que no disponga de Second entre sus filas. Acierto seguro. Anotaremos que le sigan los pasos...
Fuel Fandango |
-¿Quién nos queda por investigar?
-Probablemente los músicos más peligrosos, señor.
¿Peligrosos? Lleva hablando de la peligrosidad de estos seres desde hace tiempo. ¡Explíquese, por favor!
-Verá señor. Hay músicos que van de ciudad en ciudad, de festival en festival, de actuación en actuación, lanzando mensajes a través de sus sones, de sus letras. Canciones que en determinados momentos socioeconómicos y ante determinadas autoridades pueden resultar "incómodos". Pueden hablar del drama de la vida de algunos. Pueden invitar a la gente a pasárselo bien. Pueden denunciar situaciones que creen injustas. Creen que son los adalides de la libertad. Eso no lo podemos permitir... En determinados lugares sus conciertos han sido prohibidos, aunque la democracia, nuestra "democracia" hace que este censura quede disfrazada de una decisión "técnica".
-¿Qué tienen estos últimos que los hace ser los más peligrosos?
-Cantan e invitar a amarse...
-¿Su nombre?
-Vetusta Morla...
Vetusta Morla |
Puede que no nos cansemos nunca de ellos. Puede que alguna vez no puedan dar el cien por cien en un bolo (es natural, es humano), pero seguro que nunca dejarán atrás su personalidad, su avasalladora presencia escénica, su mimo absoluto por el detalle, su dedicada perfección a la hora de entregarnos su música. Vetusta Morla construye catedrales en plenos conciertos con unas canciones que son piedras duraderas en su camino. Por otro lado, los madrileños tienen a sus espaldas una carrera que les posibilita elegir un set list potente y efectivo donde su seguidor ya echa de menos que no canten su "canción preferida" (tienen tantas). Pero es que aciertan edificando un auténtico monumento sonoro. El de Cádiz fue un concierto que discurrió entre momentos íntimos y líricos a otros de furia rabiosa (Los días raros, como epílogo de su show y como ejemplo de lo que acabamos de decir). Dejaron momentos de brillantez sonora y sobre todo dejaron claro que un músico que habla del poder del amor, puede con todo...
Músicos peligrosos a los que Cádiz, cuna de la libertad, propuso como inocentes. No hay un mejor lugar para conjurarnos y ver a más de ellos por aquí en el No Sin Música'20.
Zahara |
📷 Fotos: @zuhmalheur
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