Sic semper tyrannis

En el inmenso catálogo de Netflix, entre series de y por adolescentes y trillones de películas, encontramos algunas gemas en formato de documental episódico que conviene disfrutar. Y en el trasfondo, las figuras de los tiranos, los déspotas, los dictadores... y el daño que causan al mundo. Hay dos series cortitas de ver y muy disfrutables que están al alcance de todos los que tengan una suscripción a Netflix.

En primer lugar, nos detenemos en Five came back. Muchas veces había pospuesto este documental dividido en tres episodios de una hora de duración cada uno (más o menos) y los calores estivales me ha empujado a verlo de una vez por todas. Narrado por Meryl Streep y con intervenciones muy atinadas y pedagógicas de Francis Ford Coppola, Lawrence Kasdan, Steven Spielberg, Guillermo del Toro y Paul Greengrass, hace un acercamiento al uso que Estados Unidos dio al cine como medio de propaganda en la Segunda Guerra Mundial. Lo que en un primer momento se tomó como medio de promocionar la entrada en la guerra y poner en valor la actuación estadounidense en el conflicto bajo el amparo de la pura propaganda, se convirtió en un ejercicio estilístico fabuloso bajo las balas y en un documento de excepcional importancia para conocer el día a día de la conflagración y los horrores del nazismo. Claro, detrás de las cámaras estaban genios como John Ford, Frank Capra, George Stevens, John Huston y William Wyler. Pero lo mejor de Five came back es que no vienen solo los tres episodios, interesantes y apasionantes, sino que se acompaña de todas las películas que esos cineastas filmaron durante el conflicto, incluido el escalofriante documental sobre la entrada en el campo de exterminio de Dachau que filmó Stevens y que lo dejó tan impresionado y tocado emocionalmente hablando, que su vida cambió por completo. Película que sirvió para que todo el mundo abriera los ojos ante el monstruo del nazismo y que fue usado como prueba en los Juicios de Nuremberg. Todo un lujazo a nuestro alcance.

Segunda parada importante entre los documentales de Netflix. Producido y narrado por Peter Dinklage (Tyrion Lannister en Juego de tronos), Cómo se convirtieron en tiranos establece seis pautas esenciales para llegar a ser un sátrapa. Y como ejemplo, desarrolla en seis breves capítulos (entre 25 y 30 minutos cada uno), un análisis de esos pasos seguidos por alguno de los dictadores más sanguinarios: Adolf Hitler, Saddam Hussein, Iosif Stalin, Idi Amin Dadá, Muammar el Gaddafi y la dinastía norcoreana de los Kim. Una serie de narración ágil, con un despliegue visual muy agradecido, con intervenciones cortas de expertos pero que ayudan a entender el contexto y en definitiva, un documental que sin entrar en profundidades, nos cuenta los porqués de cómo llega a convertirse uno en un tirano. Instructiva, adictiva y diría que divertida (el tono jocoso de la narración ayuda a desdramatizar ciertos aspectos), si no fuera porque hablamos de algunos de los mayores asesinos de la Historia. Tampoco hace falta en ese manual de estilo del tirano que es esta serie, un capítulo dedicado a acabar con ellos. El sic semper tyrannis se lo buscaron ellos mismos con sus acciones. Recomendable al cien por cien... y además, se puede ver en una tarde junto al ventilador, porque eso de ir a la playa con tanto turista y tanto calor... eso sí que es una dictadura de las malas.