Spam! (What Remains of Edith Finch)

En toda narrativa o pieza de arte tendemos a pensar que la muerte es un elemento negativo. Un hecho inevitable que inunda de tristeza todo cuanto rodea. La importancia de la vida sobre la muerte se repite constantemente. Una vida larga, una vida corta, una vida fácil o una vida difícil, vidas que parecen eternas y vidas más efímeras que un parpadeo. Da igual el prisma con el que se mire, la vida prevalece puesto que es la única oportunidad para dignificar la muerte. O así lo creíamos. What Remains of Edith Finch trata de convencernos de que la muerte no es el final, es una segunda oportunidad tras finalizar nuestro paso por la vida. Y lo consigue. La muerte dignifica todo lo que hayamos hecho o logrado en vida. Edith Finch visita la casa familiar por última vez para descubrir si es cierta la maldición que ha provocado que sea la única del árbol genealógico y de su generación en seguir con vida. Los secretos que descubre en aquella casa permanecen bajo llave. En este hogar, la muerte se convierte en poesía.